sábado, 28 de mayo de 2011

Terminar con la ilusión del tiempo

La clave es ésta: acaba con la ilusión del tiempo. Tiempo y mente son inseparables. Retira el tiempo de la mente y ésta se para, a menos que elijas usarla.
Estar identificado con la mente es estar atrapado en el tiempo: vives de forma compulsiva y, casi exclusivamente, mediante el recuerdo y la anticipación. Esto produce una preocupación interminable por el pasado y el futuro, y una falta de disposición a honrar y reconocer el momento presente y permitir que sea. La compulsión surge porque el pasado te da una identidad y el futuro contiene una promesa de salvación, de una realización de algún tipo. Ambas son ilusiones.
Cuanto más te enfocas en el tiempo —pasado y futuro— más pierdes el ahora, lo más precioso que hay.
¿Por qué es lo más precioso? En primer lugar, porque es lo único que hay. Es todo lo que hay. El eterno presente es el espacio dentro del que se despliega tu vida, el único factor que permanece constante. La vida es ahora. No ha habido nunca un momento en que tu vida no fuera ahora, ni lo habrá jamás. En segundo lugar, el ahora es el único punto que puede llevarte más allá de los limitados confines de la mente. Es tu único punto de acceso al reino informe e intemporal del Ser.
¿Has experimentado, hecho, pensado o sentido algo fuera del momento presente? ¿Piensas que lo harás alguna vez? ¿Es posible que algo ocurra o sea fuera del ahora? La respuesta es evidente, ¿no es cierto?
Nada ocurrió nunca en el pasado; ocurrió en el ahora. Nada ocurrirá nunca en el futuro; ocurrirá en el ahora.
La esencia de lo que estoy diciendo aquí no puede entenderse mentalmente. En el momento que lo entiendes, se produce un cambio de conciencia de la mente al Ser, del tiempo a la presencia. De  repente, todo se vivifica, irradia energía, emana Ser.

Tolle,Eckhart


miércoles, 25 de mayo de 2011

La Elección Interior

     Nuestra elección interior es fundamental y marca un momento decisivo en nuestra vida.Cumplimos con esta elección si nos mantenemos siempre consciente de ella y enfrentamos la contradicción entre lo que hace hacemos y lo que anhelamos ser.Para mantener viva nuestra elección interior, es bueno que nos preguntemos:

  • ¿Estoy aprendiendo de la vida?¿Qué aprendo?¿Qué significado doy a lo que aprendo?
  • ¿Como puedo transformar una experiencia exterior en una experiencia de vida?
  • ¿Como influyen mis logros exteriores concretos con mis posibilidades interiores?
  • ¿Cómo puedo liberarme de la red de mis pensamientos y sentimientos habituales?
  • ¿Qué medio  empleo para expandir mis sentimientos y pensamientos?
  • ¿Qué pasos estoy dando para trascender el pequeño mundo de mis intereses personales?
  • ¿Qué medios tengo y empleo para aprender y no repetir en vano las experiencias?
En otras palabras, cómo transformo la serie de experiencias que constituyen mi vida en una compresión profunda que expanda mi noción de ser.¿Estoy viviendo de manera tal que puedo mantener paz interior y al mismo tiempo servir a la sociedad en que vivo, al grupo al que pertenezco?